sábado, 29 de noviembre de 2008

La diplomacia de las especias: Un toque de canela

En esta original y deliciosa película nos mudamos a la vida de una familia greco-turca que se ve obligada a mover su casa en medio de los conflictos de los años sesenta entre ambos países. A través de los ojos de Fanis, un niño griego de nacimiento y turco de adopción, y de la sabiduría de su abuelo, tomamos imprescindibles lecciones vitales sobre la diplomacia de las especias, la cocina ritual, nociones de astronomía culinaria y orientación urbana con brújulas de pimientos y berenjenas. La cocina como el ejercicio de un don alquímico que separa como un trillo lo fundamental de lo accesorio, que aprende y enseña lecciones básicas sobre la política, el amor y la vida, que lleva a su mundo vecino un toque de sensualidad y de buen vivir. Y a todo esto, ¿quién es el cocinero? El niño, claro.
Por otro lado no os podéis perder, queridas compañeras brujas, la oportunidad de ver a
George Corraface de madurito y co-ci-nan-do… Yo es que así no puedo no puedo… Si tenéis dificultades para encontrarla, yo os la presto.
Ficha de la película

Grecia, Turquía - 2003
Título original: Politiki kouzina
Dirección: Tassos Boulmetis

Intérpretes: Georges Corraface (Fanis Iakovides), Ieroklis Michaelidis (Savas Iakovides), Renia Louizidou (Soultana Iakovidou), Stelios Mainas (Uncle Aimilios), Tamer Karadagli (Mustafa)

Trailer en castellano




5 comentarios:

josman dijo...

hace un tiempo tuvimos invitados sudamericanos en casa; la señora no se pudo aguantar y comentó que el café estaba bueno, pero tenia algo que lo desvirtuaba; aunque respeto el conocimiento que de los usos y manejos "cafetiles" tienen por aquellos lares, aquí seguimos preparando el café de colombia...con una pizca de canela, y solo puedo decir...ayy, que rico, madre

Thalía dijo...

Gracias por la recomendación.

Apuntada queda

Y deja ya la baba, leñe!! XDD

Anónimo dijo...

Hay gente que no le gusta mezclar sabores, A mi me parece que 2 buenos sabores potencian el sabor. Acá tenemos por ejemplo los cafés "especiales": mi favorito es el "Calipso": café, un chorrito de Tía María, crema de leche, chocolate rayado y canela espolvoreados encima de la crema.
HUmmmm....
La canela, proveniente del árbol canelo (árbol perenne de la familia de las lauráceas), además de concedérsele propiedades afrodisíacas, se le atribuyen propiedades antidiabéticas, anticolesterolémicas, digestivas, expectorantes, antiinflamatorias, mejora la circulación, antiséptica en enfermedades relacionadas con hongos y bacterias y ayuda a combatir el mal aliento.

Y además.. es rica!!!!!!!!
Joss, adelante con la canela! ;)

PD: "Un toque de canela" ha llegado a mi país traducida como "La sal de la vida" (donde quedó la canela??? jaja)

Mar D. Ferrer dijo...

Me gusta la canela, ese café de olla mexicano con canela... qué cosa más rica!!!

Anoto la peli, la buscaré.

Besos

Circe dijo...

Confieso que yo le pongo canela al café (dicho con dos dedos sobre los ojos) porque según está saliendo toda la cocina se inunda de su olor. Además, la canela conforta, reconcilia con la vida y activa la sonrisa interior (esto me lo acabo de inventar, pero es lo que a mí me pasa). Y es un misterio, porque si fuera chocolate fundido, pues oye, tendría una explicación... pero no, es una maderita y basta un poquitín para notar la diferencia. Amos, que yo me caliento un vasito de leche para irme a dormir, como buena nena chica que soy, y le casco una ramita... y así sueño, claro...